Playa Bahamitas en Ciudad del Carmen

Ciudad del Carmen es uno de los lugares más lindos de todo el estado de Campeche, uno de los estados que junto a Yucatán y Quintana Roo conforman la hermosa e interesante Península de Yucatán, punto central del turismo en todo el territorio mexicano y acaparador de las miradas de los viajeros de todas partes del mundo.

Campeche es un destino que no puede se puede dejar de visitar pues tiene mucho para ofrecernos. Un ejemplo de ello es la gran cantidad de playas, de mucha belleza y tranquilidad, que es uno de los atractivos de Ciudad del Carmen.

Dentro de la larga lista de opciones nos encontramos con una llamada Playa Bahamitas, ubicada a unos 13 kilómetros en dirección noroeste de Ciudad del Carmen. Cada playa de Campeche nos muestra el paisaje típico del sureste mexicano pero siempre con un toque particular: en laguna veremos más presencia de vegetación, otra estará más preparada para recibir a los turistas, otra será ideal para meditar o simplemente observar el paisaje.

Playa Bahamitas es uno de los atractivos de Ciudad del Carmen porque allí se puede hacer de todo un poco. Por su extensión de dos kilómetros podemos caminar tranquilamente mientras vamos sacando fotografías al atardecer, o ir recolectando algunas conchitas marinas y caracoles de la inmensa cantidad que hay en sus costas.

Según los principios del ecoturismo, la mejor forma de conocer un lugar es a través de un acercamiento respetuoso que no modifique ese ecosistema que estamos visitando así que les proponemos como una divertida y a la vez conciente forma de pasar la tarde, poder elegir cuáles caracoles y conchitas nos gustan más pero en vez de llevárnoslas a casa, donde quedarán por siempre encerradas en una cajita de recuerdos, dejarlas allí mismo, donde las vimos, para que otras personas puedan apreciarlas de la misma forma y no se vaya modificando este hermoso paisaje.

Esta playa que se encuentra a unos 16,5 kilómetros de Ciudad del Carmen nos asombra desde que llegamos y vemos cuán cristalina es el agua. En estas mismas aguas podemos ver el resto de las conchas y caracoles así como estrellas de mar y almejas entre muchas otras formas típicamente marinas que, gracias a la claridad del agua y a la suavidad del oleaje, se pueden apreciar con detenimiento.

Además esta playa nos permite realizar varios deportes acuáticos desde natación (pues ¿quién se resistiría a entrar a esas aguas?) hasta pesca deportiva, pasando por buceo para ver más de cerca las maravillas de los ecosistemas marinos, ski acuático para los que gustan de más adrenalina y windsurf para quienes manejan a la perfección el equilibrio entre el cuerpo y las fuerzas de la naturaleza o quienes, por lo menos, quieren intentarlo.

Para quienes gusten de la tranquilidad pueden simplemente sentarse a contemplar el hermoso paisaje lleno de árboles tropicales que rodean la playa y distenderse disfrutando del aire, ese aire que solo encontramos en el sureste, cargado de aromas de la vegetación selvática y del misterio ancestral de los pueblos originarios.