Uno de los museos reconocidos por su
importancia cultural e histórica en la ciudad de Puebla, es el Museo Regional perteneciente al INAH
(Instituto Nacional de Antropología e Historia).
Dicho museo fue inaugurado en mayo de 1976 de
la mano del INA y el gobierno, sobre una superficie en forma de rectángulo con
un patio en su centro
Este museo
cuenta con una inmensa colección de obras pictóricas y escultóricas que nos
permiten conocer la cultura de los
antiguos pobladores mayas de estas tierras.
Surge en 1962 por los festejos del centenario de la batalla del 5 de
mayo, cuando el presidente Adolfo López Mateos dispone construir
un museo de artesanías del Estado.
En lo que respecta a la organización
arquitectónica del lugar, podemos
mencionar la sala de Diego Rivera (que se usa para la presentación de
distintas colecciones temporales), una enorme librería y un conjunto de
galerías. En total son tres las áreas en las que se divide este renombrado
museo.
En cuanto a la colección característica de
este sitio histórico, podemos mencionar que el recorrido de admiración de la
misma nos lleva desde el pasado prehispánico de los antepasados mayas, hasta
una sala con una serie de objetos etnográficos de la ciudad, entre varias
piezas históricas de archivo, como documentos, planos, etc.
Las
piezas nombradas pueden observarse a lo largo del paseo por las cuatro salas
con las que cuenta el Museo Regional de Puebla:
La primera
de ellas lleva el nombre de “El origen de hombre americano”,
donde se muestran vasijas y cerámicas de los antiguos dueños de esta región y
numerosos ejemplos de sus primeros ensayos con el barro y el color para obtener
cerámica anaranjada. También se exhiben restos verdaderos de los primeros cultivos (semillas de
amaranto, calabaza, chile y maíz).
La sala siguiente es la denominada “Historia prehispánica” donde se exponen una serie de maquetas cómo fueron los períodos Preclásico, Clásico y Posclásico. Se pueden admirar también un conjunto de esculturas referidas a distintas divinidades mayas y a la serpiente de cascabel (quizás en alusión al supremo dios Chaac).
La sala correspondiente a la época virreinal
tiene la característica de constar con dos grandes esculturas de perros procedentes
de Tepeaca, entre otros elementos propios de la escultura indígena en piedra.
Otro de los objetos de importancia histórica que se exhiben corresponde a una réplica de la primera pila bautismal.
Sobre la tradición indígena en la época virreinal se exhiben dos fragmentos
genealógicos, uno de la estirpe Huamantla y otro de los Xochiltepec.
Finalmente, la última de las salas de exhibición consiste en la que describe la etnografía de la región de Puebla a través de la demostración e información acerca de la religión, la política, la economía, en definitiva, una serie de aspectos de la cultura propia de este estado importante de México con el que el turista se quedará maravillado y con ansias de seguir recorriendo y admirando.
Por esto resulta una visita obligada el pasear
por las salas llenas de historia del Museo Regional de Puebla perteneciente al
INAH.
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